Francesc Casas

Francesc Casas. Seamos Smart People

¿Reverse Vending Machine, una necesidad?

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Reverse Vending Machine, ¿A alguien le suena? Posiblemente no. En España este concepto aún no está introducido y nos queda mucho camino por recorrer. ¿De que se trata? ¡aquí te lo explicamos!

Son máquinas de expedición inversa, es decir, en las que introduces un envase de plástico PET o lata de aluminio usada y la máquina te devuelve una cantidad de dinero a cambio o un vale regalo.

¿Qué finalidad persigue este sistema?

Fácil, aumentar la tasa de reciclado de dichos envases. Todos los países, en mayor o menor medida, están en la batalla de aumentar sus tasas de reciclaje de residuos, sobretodo en lo relativo al plástico, enemigo numero uno por su dificultad de desaparecer.

En la actualidad hay un montón de acciones encaminadas a ello, Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), Green Deal, Planes Nacionales, etc. todos abogan por crear y fomentar la cultura del reciclaje y la sostenibilidad. Poco a poco vamos generando conciencia pero aún falta mucho para llegar a las tasas que objetivos cercanos, como los del 2025 y 2030, nos marcan en estos ámbitos.

Los países nórdicos y centroeuropeos nos llevan ventaja, ya que tanto el sur de Europa como los países del litoral mediterráneo aún estamos muy lejos de las ratios que se nos van a exigir a corto plazo.

Yo considero que estas máquinas son de gran utilidad y deberían estar operativas desde hace tiempo, sobretodo en lugares donde hay mucho tráfico de gente. En estos sitios habitualmente se consume mucha agua y otros líquidos, generando una gran cantidad de envases, cuya recogida es complicada ya que generalmente los puntos de recogida no están preparados para volúmenes tan altos.

Que ventajas nos pueden aportar:

. Si la máquina compacta los envases dejaremos de transportar aire
. Fomentamos cultura de reciclaje disponiendo de puntos cercanos de recogida
. Ayudamos a la separación selectiva de envases
. Reciclamos plástico, cuestión fundamental hoy en día
. Preservamos la limpieza de espacios públicos

Como anteriormente comentaba, en muchos países se ha implantado el SDDR, Sistema de depósito, devolución y retorno de envases. Su funcionamiento es sencillo, cuando adquieres un envase una parte muy pequeña del precio corresponde a una especie de alquiler, de forma que cuando lo devuelves, se te retorna este alquiler.

En países con una conciencia ecológica y sostenible avanzada funciona sin problemas. Las máquinas incorporan un monedero electrónico para devolución de dinero o bien se aprovechan comercios estratégicos (normalmente los que venden estos envases) como sitios de recogida y devolución. Esta claro que hay varios actores que participan en el proceso y que esto implica espacio, tiempo y recursos, por lo que hay que compensar de alguna forma a los mismos.

Existe otra posibilidad, que también funciona cuando no es posible la implantación de un sistema SDDR, se trata de premiar al usuario. De todos es sabido que por mucha conciencia cívica que haya es necesario acompañarla de otros estímulos, digamos más apetecibles, y el sistema de premios es un buen planteamiento.

Muchas máquinas expiden tickets descuento o regalo por cada envase recogido. Es una fórmula útil que además beneficia al cliente que adquiere la maquina o el programa de puntos descuento ya que le genera más tráfico comercial y obtiene un retorno económico fácilmente cuantificable.

Lo que queda claro es que si incentivamos, vía dinero o vía premios, la tasa de reciclaje aumenta de forma considerable y participamos todos de las ventajas antes descritas. En algunos países, España incluida, existen ciertos “monopolios de facto” que controlan la recogida de estos envases. Según parece el Reverse Vending no les acaba de convencer porque temen perder la exclusividad que ostentan, cuando lo cierto es que estas máquinas lo único que hacen es aumentar tasas de recogida y fomentar cultura de reciclaje. Al final cualquier envase va a parar a la planta de reciclaje, por cierto propiedad de estos monopolios, pero siempre será mejor que llegue ya separado y si puede ser compactado aún mejor.

Para mí el Reverse Vending sólo nos aporta beneficios. Deberíamos de estar utilizando estas máquinas desde hace mucho tiempo con independencia del sistema de devolución, monetario o con regalo. Una sociedad que mira hacia la sostenibilidad y que quiere ser solidaria y ecológica no puede obviar cualquier iniciativa o producto que ayude a obtener estos valores.

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